Consultas, entrega de medicamentos y toma de exámenes, todo se suspendió por culpa de un robo. Para realizar un inventario, debieron postergar la atención de más de 500 pacientes del Centro Comunitario de Salud Familiar Llafkelén de Hualpén. Los delincuentes se llevaron equipos tecnológicos evaluados en un millón y medio de pesos, pero más allá de las pérdidas económicas están las consecuencias en los usuarios.
Es la segunda vez en un mes que es blanco de los delincuentes, el robo anterior afectó a la empresa que construye un box odontológico en el recinto. Desde la Dirección de Salud Municipal anunciaron la instalación de cámaras de seguridad.