Es una joven madre, Viviana Espinoza, tiene 22 años y tras una hepatitis fulminante tuvo que ser trasladada de urgencia hasta Concepción, en estos momentos su estado es de cuidado y es prioridad nacional para un trasplante de hígado.
Viviana tiene un hijo cinco años y toda una vida por delante, no presenta un accidente vascular importante, sí un edema cerebral que hace especial y compleja su situación. La joven se encuentra en la UCI del hospital regional y está acompañada de su familia.
La única esperanza de vida para esta mujer es el trasplante de hígado, por lo que el llamado es a la donación, sólo ese acto de amor puede cambiar su destino.