La tragedia se desató el viernes por la tarde cuando el helicóptero que sobrevolaba la hacienda San Lorenzo, propiedad del empresario Italo Zunino (73), cayó en el predio privado. De los cuatro ocupantes que viajaban en la aeronave, el único sobreviviente fue el nieto de Zunino quien se lanzó segundos antes de que el vehículo aereo capotara. Junto a Zunino, fallecieron Luis Alvarado Barrientos, piloto de la nave, y Nicolas Fossatti.