Fueron 54 milímetros de agua y vientos de hasta 120 kilómetros por hora que dejaron en evidencia que muchos no están preparados para enfrentar un temporal y menos cortes de luz. Desde el mismo sábado se disparó la venta de linternas, pilas y hasta generadores de energía.
En el comercio sacan cuentas alegres, en la mayoría de las tiendas ya no queda stock de los productos. Sobre todo de aquellas linternas que son autosustentables y que no requieren ni pilas ni conexión eléctrica para cargarse.
Quienes no están preparados aún tienen tiempo para abastecerse de artículos de emergencia. Para este viernes se pronosticó un nuevo sistema frontal, aunque de menor intensidad.