Los pescadores se tomaron desde la madrugada los accesos a Tomé y Coronel, al norte y al sur de Concepción.
En mayo debió haber llegado el primer pago, de 270 mil pesos, como bono social por la crisis en que entró la sardina, dineros que no han llegado.
En una arremetida de las fuerzas especiales, un pescador recibió el impacto de una bomba lacrimógena.
Tras intensas gestiones el subsecretario de Pesca, Pablo Galilea, confirmó a 24 horas el pago del bono a partir de la
tarde de este martes.Pero Tomé sigue movilizado, dirigentes manifiestan que no aceptarán que pescadores se queden sin este beneficio.