Catalina Santibáñez lleva ocho años en Carabineros y toda la vida amandolos aviones.Ahora está a punto de cumplir uno de sus sueños, y de paso,entrar en la historia.
Convertirse en piloto de Carabineros no es fácil, se requieren seis meses de instrucción teórica y otros seis mesesde instrucción práctica que incluyen un raid para conocer distintas pistas del país. Eso, siempre y cuando se logre entrar al curso. Quiere ser la primera mujer piloto de carabineros, pero no la única.