Vacaciones era sinónimo de descanso, pero hace mucho queesta palabra ya no destaca entre quienes veranean en los principales balneariosdel litoral. Entretención es lo que predomina, pero algunos, ya cansados detanto ajetreo y el cansancio del año, buscan una pausa.
A sólo metros de la playa, en la Avenida del Mar de La Serena,los turistas encuentran una pausa en pleno verano.
Por $2 mil pesos pueden disfrutar de una hora de yoga o pilates,y con vista al mar. Los profesores certificados guían cada movimiento yprometen resultados.