Tras la caída de una avioneta proveniente desde Isla Mocha, que cayó en el aeródromo Lequicahue en Tirúa, provincia de Arauco, el pasado 9 de julio, los habitantes de la isla protestaron, reclamando un presunto abandono de la autoridad, ya que el accidente los dejó sin transporte aéreo al continente.
Ya son 13 días que los habitantes se encuentran aislados y tras la situación, diversas protestas simultáneas se realizaron desde la isla y desde la Plaza de Armas de Lebu, comuna a la que pertenece administrativamente la isla.
Los muchanos que estaban en el continente no han podido regresar a sus hogares desde el 9 de julio, cuando la avioneta contratada vía subsidio de los fondos espejos del Transantiago se terminó estrellando producto de los fuertes vientos en la zona.
Debido a esto se revisó el contrato con la empresa que incluía en una clausula reemplazar la avioneta en caso de falla, sin embargo, ésta no incluía accidente aéreo. Desde ahí no se ha podido entrar ni salir de la Isla Mocha.
Según informan los habitantes, los últimos viajes se han hecho solamente en lanchas descubiertas arriesgándose peligrosamente por los fuertes vientos que hay en esta época.
Uno de los casos de esta situación es el de una madre junto a su hjio de dos años que debe viajar por esta vía para poder llegar a destino y acceder a un control médico.
El vocero de los manifestantes de Isla Mocha, Sergio Beltrán, recalcó que los viajes se han tratado de realizar en lancha y en botes de pequeño tamaño lo que sería "un riesgo inminente y que, gracias a Dios, no ha pasado nada".
Tras las manifestaciones los isleños fueron recibidos en la delegación presidencial provincial de Arauco y según indicó el delegado Maurio Alarcón, están realizando "gestiones por la vía administrativa de la dirección general aeronáutica civil y la dirección civil de aeropuerto, esperamos puedan resolverse a la brevedad posible".
Finalmente se comunicó que, entre este viernes y el lunes se confirmaría una respuesta sobre u nuevo servicio aéreo entre Tirúa e Isla Mocha.