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Locatario de Angelmó vendía salmón descompuesto y lo ahumaba para disfrazar mal olor

Los pescados provenían de camiones que transportaban desechos de las salmoneras. Además de robarlos, le pagaban a los choferes para que tres veces por semana desviaran las cargas.

24horas tvn

Jueves 8 de julio de 2021

La Policía de Investigaciones desarticuló una organización que se dedicaba a la venta de salmón descompuesto, el que era ahumado y sellado al vacío para lograr enmascarar el olor a podrido.

El hecho fue descubierto en el mercado turístico de Angelmó, en Puerto Montt, donde este pescado se comercializaba en cuatro puestos del lugar.

Según relató la PDI a LUN, el locatario robaba los ejemplares de la mortalidad de la industria salmonela, es decir, todos aquellos pescados que eran desechados.

En detalle, el subcomisario Jaime Delgado de la Bicrim de Puerto Montt, precisó al mismo medio se que robaron seis camiones encargados de transportar dichos salmones a las plantas de procesamiento de harina de pescado, los que debido a la descomposición misma no contienen ningún tipo de cadena de frío.

Además, tres veces por semana, los conductores de los camiones, desviaban las máquinas hasta una parcela en Pargua, donde se descargaban cerca de 3 toneladas de pescados podridos. Tras ello y para no levantar sospechas, se rellenaba lo faltante con agua.

Por todo lo anterior, se le pagaban cerca de un millón de pesos a cada camionero.

El siguiente paso de la organización, era llevar los salmones hacia unas bodegas, donde trabajadores se encargaban de filetear, desvirar y ahumarlos, para así disimular el olor a descompuesto.

Todo lo anterior era realizado en la noche, ya que a primera hora de la mañana, el producto era entregado al locatario en cuestión, el que tenía cuatro puestos en el turístico mercado.

“La organización estaba compuesta por 25 personas. Todas fueron detenidas. Cada uno cumplía un rol específico. El líder, por ejemplo, organizaba todo, desde el reclutamiento de los camiones hasta la entrega del salmón a su principal comprador. Esta persona daba las órdenes y supervisaba la operación (…) Él dirigía y después se iba en su propia camioneta, no en el furgón de carga”;

Del total de los detenidos, cinco quedaron en prisión preventiva y los demás con arresto domiciliario.