Una joven madre de Linares dice estar viviendo un calvario luego de que, luego de la cesárea a la que fue sometida por su segundo embarazo, los profesionales de salud le dejaran un apósito en su vientre.
De acuerdo a los antecedentes recopilados por TVN Red Maule, Francisca Vilches tuvo su segundo hijo hace cuatro meses pero no ha podido hacerse cargo de él, pues las lesiones en su estómago le impiden trasladarse y hacer su vida con normalidad.
"Yo pensaba que los dolores que sentí tras el embarazo eran normales, pero me debieron hacer exámenes y operarme nuevamente", dijo.
Francisco Azócar, subdirector de Gestión de la Clínica Hospital de Linares, lugar donde se hicieron los procedimientos, reconoció la existencia del objeto, el cual fue sustraído.
No obstante, aseveró que Vilches llegó a la primera intervención de parto con problemas de pancreatitis, situación que sería la causante de sus dolores posteriores.
"Mi mamá me tiene que ayudar en todo. Tengo fe en que me voy a recuperar, pero me da mucha pena e impotencia", declaró la afectada.
Asimismo, la familia no descartó recurrir a la justicia para determinar responsabilidades del caso.