El ministro de Justicia junto a gendarmería inauguraron la primera oficina de derechos humanos al interior de la cárcel de Rancagua, tras las imágenes que revelaron la golpiza contra internos de ese recinto. Una iniciativa que busca garantizar la integridad de quienes están privados de libertad y que pretende ser replicada en otros centros penitenciarios del país.