La defensa de John Cobin explicó lo sucedido este domingo en Reñaca luego de que el aludido disparara a un manifestante que estaba en plena vía pública, aludiendo que actuó en legítima defensa pese a lo cual el tribunal decretó prisión preventiva durante los 90 días que dure la investigación.
Durante la jornada, los abogados explicaron que el imputado portaba un arma debidamente inscrita porque practica el tiro dentro de un polígono, por lo cual tiene experiencia en el manejo de armas.
Explicaron que cuando iba en camino a realizar este hobbie, se encontró con una turba que le bloqueó el tránsito y pidió que bailara para dejarlo pasar, pero que comenzó a ser atacado cuando no quiso aceptar esta situación.
"Él tiene un perfecto manejo del español, pero no hay que desconocer que es americano. Pero se asustó cuando unos 20 o 30 que se abalanzaron y lo agredieron porque andaba con un chaleco amarillo", complementó la defensa.
Cobin sufrió un "miedo insuperable", prosiguieron los abogados, razón por la cual primero apuntó a una turba, pero al ver que no se alejaron, disparó en tres o cuatro situaciones.
"Si él hubiese querido matar le bastaba con un tiro", añadieron, descartando el dolo e intención de matar que sostuvo la Fiscalía. "Solo quiso reducir el peligro inminente que es lo que avoca la ley", agregaron.
Consignar que el tribunal desestimó la existencia de pruebas que, de momento, demuestren la tesis de la defensa de Cobin, decretando la prisión preventiva como medida cautelar.