Rodrigo Aguayo Flores, de 49 años, asesinó de un disparo en la cabeza a su pareja Paola Fuentealba Gatica, de 42 años, en la localidad de Ránquil. Este es el cuarto caso de femicidio que afecta a la región de Ñuble en lo que va del año.
Cabe recordar que el hecho ocurrió el pasado domingo 12 de octubre, cerca de las 18:30 horas, cuando el sujeto atacó con una escopeta a la mujer y posteriormente se disparó en el tórax, muriendo ambos en el lugar. Una de las hijas de la víctima escuchó los impactos y contactó a Carabineros.
Si bien no había denuncias de violencia intrafamiliar en Carabineros ni en Fiscalía, Morelia Fuentealba, hermana de la víctima, aseveró que habían percibido indicios de violencia psicológica en la relación.
"Yo sabía que había abuso psicológico, mucho abuso psicológico. La trataba de dejar sola, que no compartiera con mucha gente. Nunca nos contó que él le había pegado", sostuvo.
Asimismo, agregó que "la verdad es que ella ocultaba muchas cosas. Nosotros nos venimos enterando hace menos de dos meses, la verdad. Le dijimos que por qué no lo había dicho antes, y era porque igual le daba miedo".
De acuerdo con María de los Ángeles Cáceres, fiscal de Quirihue-Coelemu, la mujer ya había comunicado sus intenciones de dejar al hombre.
"Sus hijos señalan que sus padres mantenían problemas en la relación por celos y se encontraban ya en proceso de separación", informó.
Es importante consignar que, según el Sernameg de Ñuble, los casos de femicidios consumados en la región aumentaron en un 50% respecto del año pasado.