Click acá para ir directamente al contenido

Gripe aviar: investigan a 250 aves fallecidas en la región de Antofagasta

Las autoridades hicieron un llamado a evitar la manipulación de aves para evitar posibles contagios del virus.

24horas.cl

Miércoles 14 de diciembre de 2022

El Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) se mantiene investigando la muerte de 250 aves en la región de Antofagasta tras la detección de dos casos confirmados de gripe aviar en la zona, además de otros dos registrados en la región de Arica y Parinacota e Iquique.

El subsecretario de Agricultura, Javier Guajardo, dijo que "la influenza aviar la venimos viendo hace meses y hemos estado preparándonos para ello. Esta influenza que afecta fuertemente a las aves migratorias empezó en el hemisferio norte, y ha ido avanzando a nuestro país. Ya hoy día se encuentra en las regiones de Arica, Tarapacá y Antofagasta".

Sobre esta última zona, la autoridad indicó que "hemos tenido un total de 250 aves migratorias fallecidas", y que se mantienen en coordinaciones para evitar la propagación del virus en "la mejor forma posible".

Según detalló Guajardo, las aves fallecidas se mantienen siendo analizadas para confirmar si estos pájaros se mantenian con el virus.

No obstante a ello, el subsecretario subrayó que "ya sabemos que existe presencia del virus en la región, eso ya es definitivo. Hoy se está viendo principalmente en pelícanos, y se está viendo si hay otras especies de aves que puedan estar afectadas".

"El llamado principal es a evitar la manipulación de estas aves, porque genera que el virus se pueda diseminar a las casas y a los gallineros, provocando también un problema dentro de la alimentación de las familias, pero también en zonas más hacia el centro, donde hay grandes criaderos que exportan la producción huevos, de carne, y sería bastante complejo que esto se pudiera transmitir", expresó Guajardo.

En esa misma línea, el representante del Ministerio de Agricultura explicó que "esta enfermedad también constituye una zoonosis, es decir, una enfermedad que potencialmente se pueda transmitir a las personas. No es muy habitual, pero también queremos evitar al máximo cualquier posibilidad de este tipo".

"Lo más importante es que las personas, sobretodo a nivel de playa en la que puedan ir a veranear, si encuentran un ave muerta o que esté 'rara' o muy enferma, no hay que tomarla, no hay que manipularla. Hay que llamar a los números que corresponden, y serán nuestros especialistas quiénes irán allá con todas las medidas de bioseguridad para tomar y sacar a esas aves, para así hacer los análisis necesarios", finalizó.