Un hombre fue condenado por violar, embarazar a su sobrina y después obligarla a abortar. Tras el crimen, el sujeto enterró el feto en una toma de Arica.
De acuerdo con la Fiscalía de Arica y Parinacota, los hechos se remontan al año 2018 cuando la víctima tenía 9 años y estaba bajo el cuidado del aludido y su tía materna.
Tras los abusos, la víctima resultó embarazada entre los meses de junio y julio de 2024. Es por ello que el condenado compró pastillas abortivas en Tacna, Perú.
Usando su posición de autoridad, el sujeto le señaló a la joven que tenía la opción de decirle a su tía que tenía novio o realizarse el aborto. Tras ser amenazada, ella fue obligada interrumpir su embarazo.
"El acusado, siendo una figura paterna y de autoridad respecto de la víctima, la manipuló señalándole que solo tenía dos opciones; la primera era mentirle a su tía y decirle que tenía 'pololo', y que con este había tenido relaciones sexuales; o bien tomar las pastillas abortivas y hacer como si eso nunca hubiera pasado para que todo siguiera igual", dijo el ente persecutor.
Posterior a la ingesta, el hombre tomó al feto con una toalla y lo guardó en un tarro para enterrarlo al día siguiente en una toma.
La Policía de Investigaciones (PDI) logró dar con el hallazgo del feto y determinó que la víctima tenía 12 semanas de embarazo al momento del aborto.
El responsable fue condenado por los delitos de abuso sexual reiterado, violación, estupro reiterado y aborto. Su sentencia será dada a conocer este viernes.