Hablar de condones aún representa un tabú en muchas conversaciones cotidianas, lo que facilita la circulación de creencias erróneas que afectan tanto la experiencia sexual como la protección frente a embarazos no deseados e infecciones de transmisión sexual (ITS).
Uno de los mitos más comunes es que todos los preservativos son del mismo tamaño.
"Elegir la talla correcta de condón es clave para la seguridad, comodidad y eficacia del preservativo. Aunque muchas personas creen que hay una sola talla 'universal', lo cierto es que hay diferentes tamaños y formas, y usar una talla incorrecta puede provocar que el condón se rompa, se deslice o simplemente resulte incómodo. Si el preservativo es muy grande, puede deslizarse durante la relación sexual; si por el contrario es muy pequeño, puede romperse o causar molestias. En ambos casos, se compromete no solo el placer, sino también la protección frente a embarazos no deseados e infecciones de transmisión sexual (ITS)", explica Priscila Preisler, matrona de DKT South America.
Sensibilidad, confianza y otros malentendidos sobre los preservativos
Además del tema de la talla, hay otros mitos arraigados en torno al uso del condón. Uno de ellos es la creencia de que el preservativo reduce significativamente la sensibilidad. Otro es que no es necesario cuando se mantiene una relación con una pareja estable o de confianza. Estas ideas, aunque frecuentes, son infundadas y pueden llevar a prácticas sexuales desinformadas.
La especialista subraya que desmitificar estos conceptos es crucial para avanzar hacia una sexualidad más libre y responsable.
“La educación sexual no puede quedarse solo en el ‘usa condón’. Es urgente que avancemos hacia una enseñanza que incluya el cómo usarlo bien, qué tipo elegir, cómo leer su fecha de vencimiento, y por qué es importante que se adapte al cuerpo de cada persona”, agrega Preisler.
Consejos para una elección informada del condón
Para quienes tienen encuentros sexuales ocasionales o están explorando nuevas experiencias, la elección del preservativo adecuado es fundamental. Preisler ofrece tres recomendaciones básicas:
- Comparar con la tabla de tallas: Usar la medida personal para identificar si se necesita un condón ajustado, estándar o grande.
- Probar diferentes marcas y modelos: Las sensaciones pueden variar según el material, grosor o forma del preservativo. No todos los XL son iguales.
- Revisar el empaque: Algunas marcas indican la talla en milímetros; otras utilizan nombres comerciales como "Snug Fit", "Large" o "Comfort XL".
El llamado desde el sector de la salud es claro: es necesario que los programas de educación sexual incluyan información práctica y detallada sobre el uso del preservativo. Promover conversaciones abiertas, libres de prejuicios y sustentadas en el conocimiento es un paso esencial para garantizar una vida sexual más segura y saludable.