Tal como si fuera Viña del Mar, Cecilia Bolocco y Rafael Araneda sucumbieron ante los pedidos del "monstruo" del Estadio Nacional.
A coro de "el beso, el beso", los animadores, los primeros en salir en el principal recinto deportivo de Chile se besaron ante los asistentes.
Sólo "un piquito" que debió repetirse y el público quedó feliz.