El uso de WhatsApp es una constante en el mundo actual, sin embargo muchas veces en lugar de facilitarnos la vida, nos ocasiona problemas con nuestro entorno.
Esto, porque al tratarse de una comunicación no verbal, los mensajes pueden tener dobles lecturas que no siempre agradan a nuestro receptor.
Por otro lado, también es probable que algunos abusen al decir cosas que no se atreverían "cara a cara", pero esto puede generar un efecto totalmente opuesto al que se quiere conseguir.
Lo cierto es que la App no es el problema, sino que el uso que se le da a ella. Por ello, te invitamos a seguir estos consejos para evitar indeseables "peleas" o malos entendidos.
1. No uses emoticonos para reemplazar las cosas que dirías a la cara:
Aunque los emoticonos pueden ser un acercamiento para expresar emociones, nunca serán tan ricos como la expresión facial y corporal.
En el fondo, la idea es entender que están limitados al contexto de WhastApp y que se trata de una versión estandarizada de la expresión de emociones reales como las que se dan con miradas, caricias o abrazos.
Por muchos emoticonos que existan, nunca igualarán a la comunicación cara a cara.
2. Evitar expresiones demasiado tajantes
La recomendación es clara: no expresar por WhatsApp aquello que no se diría a la cara.
La idea es que todas las expresiones o frases que resulten demasiado tajantes sean matizadas al momento de comunicarlas, de manera de evitar otras interpretaciones.
Para saber esto, es recomendable preguntar al receptor si comprende lo que estás diciendo, aunque ojo, es preferible usar la expresión "¿me explico?", en lugar de hostigar con muchos "¿me entiendes?".
3. Controlar la ansiedad ante la ausencia de una respuesta inmediata
El doble check azul puede ser un factor de ansiedad para quien envía un mensaje, pues está seguro que el receptor lo ha visto.
La recomendación es preguntarse si es realmente urgente que respondan, dependiendo del contenido del mensaje. Dejar el celular a un lado y distraerse es una opción.
También se recomienda no mostrar la última hora de conexión para evitar este tipo de control.
4. Evitar ciertos temas y gestionar momentos
Hay cosas que simplemente no se deben hablar por mensajería, y preferir la conversación cara a cara.
Aunque para algunos sea más sencillo hablar de temas sentimentales por WhatsApp, pues en persona les da vergüenza, pero la invitación siempre es a preguntarse si vale la pena hablar ese tema tan importante con alguien a través de mensajería.
Otro factor relevante es considerar el momento en que se envían los mensajes.
Volver de una fiesta y enviar un mensaje a una ex pareja o incluso a un jefe puede ser una pésima idea.
Siempre es mejor mantener la cautela y si existiera algo que aclarar, encontrar el momento y la forma oportuna. (Si olvidaste por qué, regresa al punto 2).
5. Piensa cómo WhastApp te define:
Si bien lo que hablamos y la forma que hablamos nos define, también lo hace -en el contexto de la mensajería- la forma en que escribimos por WhatsApp.
Es por ello que la recomendación es tener cuidado con la forma en que escribimos, los horarios y lo que decimos. Todo ello estará hablando de ti.
Foto: Agencia Uno