Indrajeet Bhuyan parece que tenía la intensión de encontrar una falla en WhatsApp o de hacerle pasar un mal día a alguien.
El joven de 18 años halló la forma de botar la aplicación web o la versión móvil de la mensajería instantánea: enviando emojis.
Pero no sólo se trata de enviar las caritas felices o de una carita malvada para hacer caer el otro, sino que decidió enviar emojis hasta que la app no diera más. En total fueron 42 mil los emoticones enviados, los que hicieron colapsar la aplicación.
Según informó Bhuvan esta prueba funciona en web y en Android botando el sistema y debiendo borrar la conversación completa, mientras que en iOS sólo pone lento el servicio.
El proceso de prueba quedó registrado en video y Bhuvan aseguró que ya se contacto con la compañía para informar del error.