Al parecer no todos podrán ver el mundo bajo la óptica de las gafas de realidad aumentada Google Glass.
Esto porque Google ha habilitado una sección de preguntas frecuentes sobre el dispositivo, en donde admite que no es apto para todo el mundo y que "podría causar problemas de visión".
Son muchas las dudas en torno al que está llamado a convertirse el producto tecnológico estrella al momento de su lanzamiento. La compañía lo sabe y comienza a responder las interrogantes para que el público pueda comenzar a familiarizarse con el producto.
Google hace hincapié en la principal característica de sus gafas: No son indestructibles, aunque sí son "robustas, cómodas y creadas para servir a la vida diaria". Por ello, promueve a los usuarios a mantener sus dispositivos a salvo y secos.
Ante la pregunta más repetida por los usuarios: "¿Google Glass puede ser usada por todo el mundo?", la empresa responde de manera tajante que "Glass no es para todo el mundo". Entre sus explicaciones, Google reconoce que pueden producir dolores de cabeza o estrés de ojos "al igual que unas gafas convencionales".
El aparato tampoco es recomendable para aquellos que hayan sido operados por láser, ni para los menores de 13 años, ya que "podrían romper las gafas o dañarse a sí mismos". Además, establece que "los términos de servicio de Google no permiten registrarse a los menores de 13 años" condición indispensable para usar las Google Glasses.
Se pregunta también si las gafas pueden ser usadas en cualquier lugar a lo que responde que "como todo, tienen un momento y un lugar".Insta a los propietarios del dispositivo a tener en cuenta a su entorno y no usarlas donde "aquellos que estén alrededor puedan no querer ser fotografiados o grabados", como en la sala de espera del médico.
Respecto a su uso durante la conducción, los de Mountain View responden que "depende de dónde se usen y cómo", ya que no podrán ser usadas en aquellos lugares donde exista una normativa en contra del uso de los terminales móviles al volante de un coche o una bicicleta.
Finalmente, Google también realiza las siguientes advertencias: no es recomendable su uso mientras se realiza submarinismo o se utiliza un martillo neumático.
Con esta estrategia, la compañía pretende desmitificar las gafas, destacando que ni todo el mundo puede usarlas ni su uso es recomendable en toda clase de establecimientos ni situaciones. Además, se cubre las espaldas ante posibles demandas por algún tipo de problema derivado del uso de este dispositivo.