Es la carta con la cual Microsoft pretende estabilizarse tras las pérdidas registradas durante el último trimestre, y por ello la compañía de Bill Gates cumplirá los plazos anunciados para la salida al mercado de Windows 8.
Ejecutivos confirmaron que el sistema operativo saldrá a la venta el 26 de octubre, casi tres años después del lanzamiento del Windows 7.
Esto significa que los clientes podrán actualizar sus equipos con el nuevo sistema en esa fecha, o comprar el nuevo hardware con el software ya instalado en las tiendas.
Por lo general, la empresa no anuncia públicamente la fecha del lanzamiento hasta que queda poco para la cita, pero a menudo ha declarado que aspira a sacar una nueva versión de Windows cada tres años.