"¿A quién queremos engañar?".
Esa pregunta que me hizo un amigo cuando lo invité a tomar "una" cerveza después del trabajo es la misma que se tienen que hacer los millones de chilenos que celebrarán el Año Nuevo este martes.
El miércoles 1 de enero -lo queramos o no lo queramos, lo busquemos o no lo busquemos- una gran cantidad de compatriotas amanecerá con resaca tras tomar como si el mundo -y no el 2013- se fuera a acabar.
Frente a ese inminente y doloroso escenario, es importante tener claro desde ya qué hacer para aliviar los molestos síntomas de la caña, que ataca sin piedad la cabeza y el estómago.
¿SI TOMÉ TANTO, POR QUÉ TENGO SED?
Para enfrentar y mirar a la cara a la "caña" es importante primero dejar de lado los mitos y las "recetas mágicas" que siempre han rondado frente a este fenómeno y conocer técnicamente por qué uno se siente mal luego de "caerse al litro".
Según explica la nutricionista de Laboratorios Caledonian de Viña del Mar, Karen Villalón, la resaca "es un estado en que el organismo tiene un conjunto de síntomas como dolor de cabeza, debido a las sustancias tóxicas que tienen los destilados; mucha sed –debido a que disminuye la vitamina B1; distensión, dolor abdominal, muscular y ojos congestivos, incluso en algunos casos puede provocar diarrea o náuseas".
Para superarla (o enfrentarla de manera digna), la experta hace hincapié en que hay que mantenerse siempre hidratado, antes y después del carrete. En la previa puede ser clave para amortiguar el "hachazo" y posterior puede ser la salvación.
"La resaca siempre se puede evitar con una buena hidratación, es muy importante hidratarse sobre todo si va a beber alcohol, muchas veces tenemos sed y bebemos más alcohol, lo que provoca una alta deshidratación y por ende un fuerte dolor de cabeza al día siguiente, entre otros molestos síntomas", indica Villalón.
Tras la precisión de la especialista, debemos eliminar de plano la clásica y creativa pregunta: "¿si tomé tanto anoche, por qué tengo tanta sed?".
UN TIPO DE TRAGO Y NO EXAGERAR LA COMILONA"
Otros consejos que entrega la nutricionista es "beber con moderación", consumir sólo un tipo de destilado (ron o pisco o vodka o whisky) y - si se puede- preferir los tragos con menor graduación alcohólica como cerveza o vino.
Karen Villalón además advierte que los hombres y las mujeres tienen distintos metabolismos. Por eso y también por un tema de peso, los hombres tienen una tolerancia al alcohol de 3 a 4 unidades y las mujeres de 2 a 3.
Finalmente, para evitar el malestar gastrointestinal -que se agrega a la caña y su mezcla puede ser letal- es importante también no comer en exceso.
"Se debe, esperar digerir la comida anterior hasta la siguiente, para favorecer la producción de jugos gástricos, comer una manzana verde antes de cada comida para preparar la digestión y evitar tomar líquidos mientras esté comiendo, ya que éstos disminuyen la potencia de los jugos gástricos", puntualiza la experta.