Después de casi dos décadas de matrimonio, dos hijas en común y una historia de amor que parecía inquebrantable, Nicole Kidman y Keith Urban tomaron la decisión de poner fin a su relación.
Las especulaciones sobre los motivos no tardaron en aparecer en medios de espectáculo y redes sociales, sin embargo, detrás de la mediática ruptura habría un episodio clave que marcó el declive.
Según expuso Daily Mail, una discusión en la que Urban expresó su descontento con la relación a Kidman habría marcado un punto de no retorno: "Keith nunca ve a Nicole, o ella está filmando o él está de gira", explicó una fuente.
"La intimidad ya no estaba ahí, simplemente seguían su rutina. Si luego de esta separación se unen mucho más, sería excelente. Pero Keith tuvo que decirle que no se sentía feliz", agregó el informante.
Aparentemente, el reclamo de su esposo por el desgaste de su relación, dejó a Kidman "desconcertada" y "sorprendida".
Así lo confirmó un cercano de la actriz a People, ya que, si bien Urban fue quien tomó la iniciativa, Kidman no habría querido la separación.
"Ella no quería esto", dijo, destacando que la intérprete "ha estado luchando por salvar el matrimonio".
