La actriz Kelley Mack conocida por su destacado papel de "Adeline" en la serie de "The Walking Dead" murió a sus 33 años producto de una grave enfermedad.
Así lo confirmó el medio The Hollywood Reporter, donde informó la lamentable noticia para todos los fanáticos de la artista.
En detalle, Kelley Mack falleció este 2 de agosto en la ciudad de Cincinnati debido a un tumor en su sistema nervioso.
"Kelley falleció pacíficamente junto a su amada madre"
Además, en redes sociales su hermana despidió a la actriz: "Con una tristeza imborrable estamos anunciando el fallecimiento de nuestra querida Kelley. Una luz tan brillante y ferviente ha transitado al más allá, donde todos finalmente debemos ir".
"Kelley falleció pacíficamente el sábado por la noche con su amada madre Kristen y la firme tía Karen presentes. Kelley ya llegó a muchos de sus seres queridos en forma de varias mariposas. La echaremos de menos tanto hasta las profundidades que las palabras no pueden expresar", agregaron.
"Ella querría que todos ustedes supieran lo mucho que ella los ama. Y como su hermana, quiero que todos sepáis lo valiente que fue ese duro SOB, especialmente cuando decidió dar el salto para reunirse con Dios. Estoy tan jodidamente orgullosa de ella", finalizaron en la publicación.