Como es tradición, el segundo capítulo de "Mea Culpa: El regreso" culminó con una entrevista de Carlos Pinto a Cristián Barría, conocido como "El Chacal de Puerto Montt".
El conductor llegó hasta el Complejo Penitenciario Alto Bonito de Puerto Montt, donde Barría se encuentra cumpliendo condena por el homicidio de de la chef y docente Paola Vega.
Carlos Pinto comenzó realizando preguntas sobre la infancia de Barría, quien señaló que no tuvo una infancia fácil: "Para mí el regalo más grande que yo creo, era un cariño de mi familia. Pero no lo tuve". "Si mi viejo se hubiera preocupado por nosotros, o nos hubiera mostrado cariño como padre, yo no habría estado aquí. Nosotros por culpa de él perdimos una buena oportunidad con mi hermano, una oportunidad que jamás en la vida vamos a tener ahora".
Además, admitió que nunca fue a la escuela más de tres días, por lo que nunca aprendió a leer ni a escribir.
Al ser consultado sobre si ser analfabeto le traía problemas en su vida diaria, Barría afirmó que era algo de lo que se sentía orgulloso, y que no lo veía como una habilidad necesaria para vivir: "Es que para las personas como yo, yo creo, no es necesario, vas a salir adelante como sea, aunque no sepas leer (...) Yo me siento orgulloso de no saber leer este, porque gracias a Dios yo he tenido buenos trabajos. Porque son pocas las personas que no saben leer y tienen trabajo".
Posteriormente, Carlos Pinto consultó a Barría por el brutal crimen cometido. "Uno no tiene derecho a quitarle la vida a alguien", señaló el criminal, quien señaló que el móvil de su delito fue "solamente robarle el teléfono". Ante la respuesta, Pinto mostró su incredulidad, señalándole: "Cristián te robaste el teléfono, ese era tu afán, pero terminas quitándole la vida a una mujer inocente".
Ante lo planteado por el conductor del programa, Barría señaló: "Yo sé yo sé que cometí un delito grave, que le quité la vida a una persona inocente, otros cometen un delito más grande y están en libertad".
"¿Acaso tú quieres estar en libertad?", preguntó Carlos Pinto al escuchar la respuesta de "El chacal de Puerto Montt".
"No. Yo no quiero estar en libertad. Si algún día el Tribunal o la Corte de Apelaciones a mí me bajan los años, yo no estoy pidiendo mi libertad", respondió Barría.
"Aunque yo le pida perdón a la familia, no les voy a devolver a la persona"
Carlos Pinto le preguntó a Barría si considera que su condena es justa, a lo que éste respondió: "Justa. yo creo que sí. Aunque yo le pida perdón a la familia, no les voy a devolver a la persona".
Al consultarle sobre si estaba arrepentido, Barría señaló que "uno se tiene que arrepentir antes de cometer un delito, no arrepentirte cuando estás encerrado".
"Uno no puede decir que la cárcel es felicidad. No es felicidad. Ahora, para la persona que está acostumbrada, sí. Porque si a mí se me muere alguien afuera, a mí no me darían el permiso de medio día fuera, por peligro de fuga", continuó Barría, quien además relató que ha tenido oportunidad de fugarse, pero que no lo hizo y no lo haría.
"Cuando me operaron me llevaron a operarme, después otro día me dan el alta, en la misma noche salgo de urgencias de vuelta. Los funcionarios me dejaron esposado de un solo pie, dejaron todas sus armas encima del mesón. Yo habría dicho ya, voy a fugarme, tenía todas las armas ahí y ellos estaban buscando café. Pero no lo hice, ¿para qué?", planteó.
Asimismo, Cristián Barría confesó que nunca ha recibido visitas en la cárcel, y que no se considera una buena persona.
"Yo no me puedo considerar buena persona. Lo mismo que usted me preguntaba, si yo tengo corazón... Si yo hubiera sido una persona buena, no habría cometido un delito. No le habría quitado la vida a una persona. Uno tiene que pensar antes que hace las cosas. Si yo cometí un delito, ya no soy bueno. Si hubiera tenido corazón, o sentimientos, no le habría quitado la vida a una persona", finalizó.