En tan sólo diez segundos, fue demolida una construcción de miles de kilómetros cuadrados y treinta y cuatro años de antigüedad.
Se trata del edificio del ayuntamiento de El Paso, en Texas (Estados Unidos), el cual fue dinamitado desde sus bases.
A cargo de la explosión estuvo un equipo de ingenieros, que actuó de manera conjunta con Bomberos.
Cerca de las 9.00 horas local, se procedió a detonar las 400 libras de dinamita.
En el lugar, se emplazará un nuevo estadio de béisbol para un equipo profesional Triple-A.