"Estoy un poco quemado, voy a tomarme una larga, larga pausa".
Esas fueron las palabras del actor de 39 años, Leonardo DiCaprio, justo cuando se estrena su nueva película, "Django desencadenado", bajo la dirección de Quentin Tarantino.
El actor, de 39 años, advierte que durante un tiempo no pretende participar de proyectos cinematográficos, sino más bien descansar y dedicar su tiempo libre a asuntos que para él son importantes, según comentó en una entrevista al diario alemán Bild Zeitung.
"Me gustaría mejorar un poco el mundo. Recorreré diferentes lugares con el objetivo de hacer algo por el medio ambiente", señala el actor.
Lo cierto es que el intenso ritmo de trabajo que ha tenido en los dos últimos años, con tres películas grabadas, parece haberle pasado cuenta. Sobre todo su papel como Candie en el western de Tarantino.
"Ha sido un personaje terrible de interpretar. Dudé si hacerlo, porque no hay nada en el papel que me provocara simpatía. Ha sido el trabajo más difícil de toda mi carrera", señaló DiCaprio.
Al actor parece no haberle gustado el tipo villano -cruel y muy violento- que le tocó interpretar, sumado a que las especulaciones advierten que el actor se habría sentido decepcionado por el hecho de que las candidaturas para los Oscar no reconocieron su trabajo.
"Odiaba a Candie porque no había nada en él con lo que pudiera identificarme. Le odio porque es uno de los personajes más narcisistas y racistas que he leído en toda mi vida", agregó.