Siete años han esperado los fanáticos de los libros de Dan Brown para ver la tercera adaptación de la saga denominada Inferno que protagoniza Tom Hanks. Y aunque finalmente la fecha de estreno en la pantalla grande será el 14 de octubre, muchos se preguntan cuál fue la real causa para el atraso de la producción.
Su director, Ron Howard, despejó el misterio. Para el estadounidense la principal razón de la demora fue la necesidad de tomarse un descanso tras la aparición de "Ángeles y Demonios". Además agregó que el inicio de las filmaciones se dio solo cuando todo el elenco creyó que había algo emocionante y digno de hacer.
Y así pasó. La historia "se sentía fresca", señaló Howard. En esta entrega se podrá apreciar a un Robert Langdon (Tom Hanks) con problemas de memoria que debe colaborar junto a la doctora Brooks para frenar una trama terroristas y así salvar a la humanidad.
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Todos los símbolos del largometraje estarán relacionados con la Divina Comedia de Dante Alighieri, obra que llevará a los personajes a adentrarse en un mundo oscuro y peligroso. Ron Howard afirmó que este componente en la novela de Dan Brown le dio la oportunidad de incorporar estilos y sonidos creativos para una adaptación que entrega un sin fin de sensaciones.