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El anillo que inspiró a Tolkien

Con 25 milímetros de diámetro y 12 gramos de peso, el anillo pareciera que fue creado para ser usado en el pulgar y por encima de un guante.

Cristobal Ponce

Miércoles 3 de abril de 2013

El "anillo único" que desencadenó toda una guerra en la Tierra Media creada por J.R.R. Tolkien, tiene un origen en este mundo.

La inspiración del autor para escribir "El Hobbit" y "El señor de Los Anillos" de ahora en adelante se mostrará al publico en Hampshire, al sur de Inglaterra, en una muestra que se introduce en el origen de la saga.

La National Trust, una organización que resguarda el patrimonio británico, expondrá de forma permanente la pieza, que fue estudiado por Tolkien (1892-1973) un año antes de escribir "El Hobbit".

El "anillo de poder" que echó a andar la imaginación del escritor fue analizado en 1929 por el arqueólogo  Mortimer Wheeler, quien buscó su conexión con una leyenda recogida en una lápida que había descubierto en una excavación.

Para el creador de la Tierra Media era importante descifrar la etimología de la inscripción en latín que había en el legendario anillo, la cual fue traducida como "Seniciaus vive bien en Dios", un detalle poco relevante para los investigadores que lo encontraron en una granja de la zona de  Silchester, hacia 1875.

Tolkien y Wheeler también relacionaron el mensaje con una lápida encontrada en un templo romano cercano, en el que había una inscripción sobre una plegaria al dios Nodens en la que se hacía referencia a la maldición contra Seniciaus, un romano que robó un anillo del templo de Lydney.

"Al dios Nodens, quien lleve el nombre de Seniciaus niega toda salud hasta que devuelva el anillo al templo", dice la inscripción en la piedra descubierta por el arqueólogo.

 

El objeto tiene características que lo hacen diferente a un anillo común. Su diámetro es de 25 milímetros y pesa 12 gramos, lo cual  hace pensar a los historiadores que se creó para ser llevado en el pulgar y por encima de un guante, tal y como lo portaba Sauron cuando se enfrentó a los pueblos de la Tierra Media.

Aunque las teorías sobre el origen de la historia son muchas, los expertos consideran que ésta pieza es muy probable que sea el génesis de la chispa que encendió la creatividad de Tolkien, ya que está relacionado con una maldición.