Si llevar al cine la historia del plebiscito de 1988 en Chile era un desafío, ahora el director Pablo Larraín aceptó uno mayor.
El cineasta nacional fue escogido para llevar a la pantalla grande el nuevo remake del clásico "Scarface" ("Caracortada") de Howard Hawks y Richard Rosson (1932), el que se ganó el respeto de la crítica con la adaptación de Brian de Palma (1983), protagonizado en su versión hollywoodense por un impresionante, Al Pacino.
La productora Universal se decidió por el chileno ante la negativa del director de Harry Potter, Davis Yates, por lo que Larraín será el encargado de darle vida nueva a Tony Montana, todo bajo el guión de Paul Attanasio ("Donnie Brasco"), quien ya se encuentra dentro del proyecto.
Según el portal The Wrap, la historia ahora se centraría en un inmigrante de origen latino (mexicano) que intenta alcanzar en Los Ángeles la cima del mundo, todo escalando como sea posible dentro del mundo de la delincuencia y las drogas.