El fracaso suele ser el camino más rápido al éxito.
En una ocasión le preguntaron a Michael Jordan cual era el secreto de su éxito. El mejor jugador de básquetbol de todos los tiempos dijo: "He fallado más de 9.000 tiros en mi carrera. He perdido casi 300 partidos. 26 veces han confiado en mí para el tiro que ganaba el partido y lo he fallado. He fracasado una y otra vez en mi vida, y eso es por lo que tengo éxito".
Entonces, ¿cuántas veces hay que fracasar para tener éxito? Tampoco existe una respuesta adecuada. Para hacerse un ejemplo de lo que cuesta el éxito, un blog de emprendedores, Funders and Founders, ha creado este video, colgado en Youtube, donde dan varios ejemplos y una respuesta: tantas como la determinación mande.
Steven Spielberg, el cineasta más reconocido del mundo fue rechazado hasta tres veces por la escuela de cine University of Southern California’s School of Cinematic Arts. A pesar de rechazar su solicitud, Spielberg confiaba en su talento y terminó por crear obras tan míticas como "Tiburón", su primer gran triunfo cinematográfico, "Indiana Jones" o "E. T.".
En el video también se ponen los ejemplos de Timothy Ferris, quien soportó 25 rechazos antes de que una editorial accediera a publicar su éxito de ventas "The four hour work week”.
Richard Branson es uno de los empresarios más ricos y de mayor éxito. Sin embargo, ha tenido que crear 400 compañías antes de lograr crear una gran multinacional, y la primera empresa que va a ofertar turismo espacial, Virgin Galactic.
El Coronel Sanders propuso sin éxito hasta en 1.009 ocasiones su receta de pollo frito a distintos inversionistas a lo largo de todo Estados Unidos, antes de fundar Kentuky Fried Chicken. Hoy es una cadena de comida rápida extendida por todo el planeta.
Silvester Stallone no siempre ha sido reconocido como un gran actor por la crítica o Hollywood. Pero gracias a la película "Rocky" logró el respeto del mundo del cine. Claro que antes de lograr plasmar su obra en la gran pantalla, el guión fue rechazado hasta 1.500 veces.
El último y más sorprendente ejemplo que propone este video es el de James Dyson, inventor de la aspiradora, quien antes de lograr una máquina que realmente funcionara, tuvo que crear 5.126 prototipos.
Un video con moraleja. No existe un camino corto al éxito. ¿Cuántas veces estás dispuesto a intentarlo?