Dicen que la mejor edad de la vida es la que vivimos en el presente.
Sin embargo, un estudio de la Universidad de Yale, Estados Unidos, hecho a dos mil personas, reveló que el punto de felicidad máxima en nuestra existencia es a los 34 años.
Esto se debe porque en esta etapa llegan los hijos, la unión del matrimonio y un buen puesto de trabajo.
En la investigación se les pedía a las personas que reflexionaran sobre la felicidad en su vida y así los expertos llegaron a una media de edad. Incluso en este período nos sentimos más cómodos con nuestra persona, se comienza a tener un aumento de sueldo y además se puede comprar una casa.
De los encuestados que eligieron los 20 años, resaltaron la libertad, vida social y la progresión de los estudios universitarios.
Los que se inclinaron por los 40 años destacaron la vida familiar, los hijos y la proyección hacia un futuro próspero.
Y aquellos que optaron por los 50 años lo eligieron por el trabajo realizado, la emigración de los niños de la casa y el final de la hipoteca. No obstante, en esta edad suele darse con frecuencia la pérdida de los padres, lo que puede provocar un bajón en el ánimo.
El factor común en las respuestas de los entrevistados era que el enamorarse era una de las razones más fuertes para estar feliz, junto con la opción de casarse. La gran mayoría de los testimonios afirmaron que con los años son cada vez más alegres.