El creador de la "Pizarra Mágica", André Cassagnes, murió a sus 86 años cerca de París.
Su famosa creación se remonta a la década de los cincuenta cuando el hombre de origen francés descubrió las posibilidades del polvo de aluminio, que le permitían hacer trazos y luego borrarlos de manera simple.
Hasta que en 1959 una empresa norteamericana llamada Ohio Art, descubrió el invento de Cassagnes en una feria en Nuremberg, quienes finalmente decidieron fabricarlo a gran escala.
La "Pizarra Mágica" ha tenido un sin fin de versiones en los últimos años, pero siempre ha conservado su función principal que es la de escribir, dibujar y borrar. Juguete que incluso en la actualidad aún es utilizado por los niños para entretenerse.