No es un ratón, ni un gato, ni un perro, ni un búho: es simplemente Furby.
Con este nombre llaman al juguete que esta navidad ilusiona a los niños, pero que además está volviendo locos a los padres al estar agotado en casi todas las tiendas del país.
Los dolores de cabeza comenzaron cuando el muñeco que cambia de personalidad y look según lo trate el usuario empezó a acabarse en las grandes tiendas y jugueterías.
Desde esa vereda, la brand manager de la importadora Hasbro, Fabiola Fuentes, asegura que el stock de productos ya fue entregado por completo al comercio y lamentablemente no tienen un catastro de en qué lugar existe disponibilidad, debido a la rápida compra del "regalón" de los pequeños.
En esa misma línea, el rastreo del juguete se hace complicado, porque es escaso en las tiendas. Al consultar por la disponibilidad del producto en distintos negocios del retail, la respuesta fue tajante: agotado.
De todas maneras, antes de comenzar con la peregrinación en medio del calor para encontrar a este simpático amiguito, tal vez te sirva descartar algunas opciones en la web y así disminuir tu recorrido.
Páginas de tiendas como Falabella, Paris, Ripley, La Polar entre otras tienen servicios online para consultar y teléfonos con atención al cliente. También hay otras opciones para revisar como Barrio Meiggs y Mercado Libre Chile en el cual hay variedad de avisos con respecto al muñeco, e incluso en las redes sociales, donde algunos aprovechan la contingencia para ofrecerlo.
También es importante considerar que el precio promedio del regalo es de 49.900 pesos.
¿CUÁL ES LA MAGIA DE FURBY?
Desde Hasbro, la empresa responsable de traer el juguete a Chile, afirman a 24horas.cl que el éxito del híbrido peluche se debe a la tecnología con la que cuenta, en tiempos en que los pequeños interactúan más con el mundo digital y que por tanto Furby "viene a cubrir una necesidad insatisfecha".
El muñeco que viene en 10 colores para elegir y cuenta con ojos formados por paneles LED que muestran símbolos según su estado de ánimo. Además tiene sensores en la cabeza, el estómago y por los lados de su cuerpo que le permiten "sentir". Su carácter lo guarda en la memoria y es capaz de escuchar y reconocer voces debido a un micrófono en su interior. Todo esto lo complementa con actividades virtuales que se pueden obtener en una aplicación tanto en App Store y en Google Play.
El fenómeno mundial tiene una larga historia, puesto que también revolucionó al mercado en 1998 y 2002, años en que su capacidad de aprender sorprendieron a grandes y chicos.