Click acá para ir directamente al contenido

Joven argentina muere de anorexia por negarse a tratamiento

Ni la adolescente de 18 años ni su familia quiso que recibiera ayuda médica, porque no se los permitía su religión.

24horas.cl TvnKaren Vera

Miércoles 19 de junio de 2013

Así murió María Antonella, este viernes en Rosario de Tala, Argentina, quien sufría de anorexia nerviosa y se negó a un tratamiento médico y psiquiátrico, debido a razones de religión.

Sin embargo el padre, Christian Mirabelli, vive un drama aún más profundo y clama que la justicia argentina le ayude a salvar la vida de sus otras seis hijas quienes sufren del mismo trastorno mental.

El abogado del padre, Gustavo Baridón, aseguró que la madre de las niñas ha “rechazado cualquier tipo de intervención médica”, oponiéndose “terminantemente”, incluso después de que falleciera la joven.

“Dentro de lo que es la impotencia del papá, de la tristeza que tiene, realmente él siempre trató de decir en los escritos, en las audiencias de manera personal, que su hija se moría, que no había otra posibilidad que no sea la muerte, y de hecho así ocurrió lamentablemente", aseguró el representante legal del padre.

La adolescente Mirabelli junto a su madre, habían  constatado en un acta que se enmarcaba en el concepto de su religión que se oponían a cualquier tratamiento u observación médica.

En tanto, en septiembre pasado, el padre presentó un escrito en el que solicitaba la intervención de la Defensoría de Pobres y Menores de Tala “para que se ocupen del tratamiento médico de su hija, puesto que veía un deterioro de su salud, pero desconocía a qué obedecía", señaló el abogado.

Baridón agregó que el padre siente “bronca e impotencia, pero ahora está realmente dedicado a salvar a sus otras seis hijas, tras esta muerte absurda".

Sin embargo, el fiscal de la ciudad aseveró que la justicia “hizo todo lo que podía hacer” para convencer a la adolescente, pero su creencia religiosa fue mucho más preponderante.

Por otra parte, la madre, Verónica Rodríguez, exhibió una carta en que afirmó que su hija “permaneció firme en su fe hasta el momento de su partida”.

Y añadió en el escrito que su fe  "no está fundada en sabiduría de hombre sino en el poder de Dios; la ciencia de lo alto que sana, que libra al hombre y limpia el pecado en Cristo”.

Finalmente, la abuela de Antonella, Cielo Roca, sostuvo: “No todo el mundo entiende nuestra fe” y agregó que “los médicos están para la gente que no cree verdaderamente en Dios, y hay que decir que hay gente que va al médico y se muere igual”.