Miles de litros fluyeron por sus cuerpos mientras el lente captaba todo.
Es la nueva propuesta del fotógrafo Blake Little, quien utilizó a humanos vivos para su último libro: "Preservation".
La técnica usada para este monumental trabajo fue simple: cuerpos (desnudos o con ropa) a los cuales se les vertía miel.
Las imágenes logradas por Little son realmente sobrecogedoras y alcanzan sin duda un tono especial, además de lo obvio del color miel, al retratar a personas normales, lejos de los estereotipos de belleza que imponen las revistas.
Niños, mujeres -algunas de ellas embarazadas-, hombres y ancianos fueron parte de las fotografías que están en este libro "Preservation" que está a la venta desde febrero y que, también abrió una exposición en la Kopeikin Gallery en Los Ángeles.
Revisa un clip con el proceso de fotografía a continuación: