Tal como ocurrió a finales de mayo, nuevamente los neoyorquinos disfrutaron del llamado "Mangattanhenge", un fenómeno que consiste en el alineamiento del sol al atardecer con algunas calles de Nueva York.
El espectáculo, que puede ser visto por transeúntes y turistas, ofrece un impresionante paisaje que mezcla el cálido resplandor del sol con un las postales tradicionales de una de las ciudades más cosmopolitas del mundo.
Este miércoles, decenas de personas se congregaron en la esquina de la calle 14 con la Sexta Avenida para captar el fenómeno que fue denominado como “Manhattanhenge” por Niel deGrasse, quien comparó el evento con lo que ocurre en el parque megalítico de Stonehenge en el Reino Unido durante el solsticio de verano.