Salieron al escenario del Movistar Arena como un equipo de fútbol, todos juntos entre el ensordecedor griterío de la fanaticada femenina, la que repletó el recinto para ver a Adam Levine y compañía.
"Animals", "One more night", "Stereo Hearts ", "Harder to Breathe", "Lucky Strike" y "Wake up call" abrieron pegaditas y sin respiro el concierto pasadas las 21.00 horas.
Con esa avalancha de hits la banda encendió al público para bajar de revoluciones luego del "Hola Santiago, son increíbles" de Levine y dar paso a "Love Somebody".
"¿Conocen esta canción?" Fue otra de las escuetas frases del frontman para los primeros acordes de "Maps", uno de los hits del disco 'V', el que da origen a la gira.
El carisma innato del también jurado de «The Voice» permite a estas alturas de show hacerse la pregunta de por qué no es solista, a pesar de no lograr una gran voz en vivo, pero que teniendo a estas alturas una banda -que es un correcto acompañamiento más que un grupo de distinguibles músicos-, podría permitirse ese lujo.
"This Love", probablemente el hit que catapultó su carrera, volvió a encender el karaoke en el recinto del Parque O'Higgins, así como encendió también los gritos cuando Levine tomó la guitarra eléctrica.
Acompañados de cuatro barras Led de gran tamaño, sumadas a dos pantallas gigantes laterales y seis músicos sobre la tarima, Maroon 5 siguió con su rápido show que antes de la hora ya había pasado la mitad de las 16 canciones del setlist, el mismo que presentaron en México en el tramo norteamericano del tour.
"Sunday Morning" fue una de las mejor logradas de la noche con un carácter más potente en la voz de Levine, un tono por sobre el resto de la banda, algo que le dio mayor protagonismo. "Payphone" con un comienzo a capela de algunos de los miembros del grupo fue otro de los puntos altos que agradeció el público.
Una muy bien lograda "Daylight", antesala de "Lost Stars", parte del soundtrack de «Begin Again» en una sesión acústica que dejó contentos a todos y que acabó con una íntima versión de "She will be Loved"
Para el final había dos que el público que se preparaba para escuchar antes de salir al frío de Santiago: la electrizante "Moves like Jagger" y la del cierre de fiesta, su más reciente súper éxito "Sugar".
Un show que terminó tras una hora y media de hits y que culminó con el amado por las chicas Adam Levine, sin camisa y envuelto en la bandera nacional gritando que lo disfrutaron y que volverian pronto, algo que la multitud ya espera nuevamente.
Foto: Agencia Uno