A las 21:25 horas de este jueves, un Estadio Monumental repleto fue el espectador de una sólida relación que se extiende por décadas.
Metallica prometió "tocaremos las canciones que ustedes escogieron" y cumplieron con creces.
La banda californiana hizo gala de toda su potencia, carisma, virtuosismo y espectacularidad sobre el escenario para hacer vibrar a los 50 mil fanáticos que llegaron hasta Macul, un show que agotó un alto porcentaje de localidades con semanas de anticipación y que acabó con los tickets que restaban a 48 horas del espectáculo final.
La potente "Battery" abrió la noche y de ahí en más nadie se quedó sin cantar. Un set list imperdible siguió con la eterna "Master of Puppets", que fue coreada y grabada por miles de celulares, los que captaron el "Are You Alive" con que James Hetfield abrió la conexión con el público.
Un show que armaron los fanáticos y que Metallica se encargo de ejecutar con todo el poder del metal de una de las cuatro bandas más importantes del género.
Un fuerte "bienvenidos a Metallica by Request" llamó a los asistentes a cantar con el alma las canciones que ellos mismos escogieron. Vinieron "Wellcome home (Sanitarium)", "The Unforgiven" y la nueva "Lords of Summer", la que tuvo una cálida recepción.
Un homenaje de Hetfield, Kirk Hammett, Robert Trujillo y Lars Ulrich al fallecido guitarrista y fundador de Metallica, Cliff Burton, fue la que anticipó un clásico: "One".
Sin fuegos artificiales, pero con una carga notable de dinamismo y perfecto sonido, los metaleros dejaron imborrables 18 canciones en Chile.
"Nothing Else matters", coreada por los 50 mil asistentes vino al show antes de la decisión del público que prefirió a "Whiplash" por sobre "Fuel" y "Whiskey in the Jar", era la penúltima canción en el Estadio Monumental.
Para el final una memorable, "Seek and Destroyed", un final de fiesta con broche de oro, un show hecho por y para los fans y la renovación de un lazo que puede seguir por muchos años más.
Metallica tiene cuerda y repertorio para rato.
Fotos: Agencia Uno.