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"No" se estrena gran aceptación en Madrid

"La película señala mucho la justicia que nunca llegó. Ahí tenemos una llaga abierta en América Latina", dijo Gael García durante la presentación de la cinta chilena que competirá por el Oscar.

Cristián Jara

Jueves 7 de febrero de 2013

Chile aspira este año por primera vez a un Oscar con la película "No". Y la cinta hace historia provocando gran expectación por parte de los medios debutando en diferentes partes del mundo.

El filme que muestra una parte poco conocida sobre la caída del dictador Augusto Pinochet fue presentada en Madrid  por su director, Pablo Larraín, y el actor mexicano Gael García Bernal.

"Hay una competencia muy dura, con películas muy buenas, pero al mismo tiempo es una categoría sumamente impredecible", dijo Larraín sobre las opciones de su película en los Oscar.

"Había que dar un salto cuantitativo que cambiara la emoción de un país, el sentimiento de desesperanza por uno optimista. Y ese fue el triunfo contundente frente al que Pinochet no podía argumentar sino con más odio", dijo García Bernal sobre su personaje, que apostó por una campaña política alegre y positiva alejada de victimismos.

"No" cuenta con numeroso material de archivo proporcionado por TVN  y la  película está grabada con cámaras de la época para mantener la armonía del formato. Nuestra estación cuenta también con derechos exclusivos para su emisión en TV.

"La película está filmada con una cámara de los años 80, de la misma forma que se grabaron las imágenes de archivo. Queríamos generar una ilusión en el espectador en la que no se distinguiera el archivo de la ficción", explicó Larraín.

A pesar de que Larraín durante la conferencia de prensa evitó establecer una relación directa con la actual situación política de Chile, para García Bernal la película tiene un importante reflejo en los tiempos actuales.

"No es coincidencia que en todas partes del mundo exista un crítica en torno a la democracia. La película incita a una pregunta muy recurrente que es: '¿Dónde estamos parados ahora en nuestra relación con la democracia y la falta de justicia social?'", dijo el mexicano.

"La película señala mucho la justicia que nunca llegó. A fin de cuentas, Pinochet nunca fue juzgado, y ahí tenemos una llaga abierta en América Latina", dijo.