San Valentín es una fecha que invita a las parejas a demostrarse su amor enviándose regalos y tarjetas con mensajes de cariño.
Pero hay un lado de esta festividad que podría estar afectando los bosques del mundo: las tarjetas que no están hechas bajo las normas de cuidado al medio ambiente.
En países de la Unión Europea se ha fiscalizado estos productos, encontrando que algunas compañías han aprovechado un vacío en la legislación correspondiente vendiendo tarjetas que contienen madera ilegal, proveniente de bosques tropicales.
De acuerdo a un estudio del World Wide Fund fot Nature (WWF) es una práctica que está sucediendo en Europa y que podría afectar aún más la deforestación de bosques.
"Estos resultados sugieren que el verdadero costo de nuestra tarjeta de valentín podría ser más grande que el envoltorio. Podrían estar contribuyendo a la perdida de algunos de los bosques más valuables del mundo", dijo Beatrix Richards, representante de WWF.
Foto: Agencia Uno.