Este miércoles, Kim Kardashian nuevamente visitó la Casa Blanca para conversar con el mandatario estadounidense sobre la reforma penitenciaria y pedir la liberación de un nuevo preso.
Según informó el medio TMZ, Kim viajó durante la noche desde Los Ángeles a Washington D.C. para hablar con las autoridades de una posible liberación de Chris Young, un hombre de Tennesse de 30 años que cumple su sentencia a cadena perpetua desde hace 10 años, por cargos relacionados a drogas, el que estaría detenido injustamente.
Según TMZ, Kim habría explicado en la cita que Young fue condenado por posesión de marihuana y por haber sido hallado con un gramo y medio de cocaína. Tras su arresto en 2010, una ley obliga a los jueces a emitir una condena preestablecida por la legislatura sin dar lugar a que el caso sea evaluado de forma individual.
En la instancia, en la que la empresaria compartió también con Ivanka Trump, aseguró que también ha estado en contacto con un juez que decidió renunciar ya que debió emitir una condena como la antes mencionada.
El 30 de mayo pasado fue la primera vez que Kim asistió a la Casa Blanca.