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Las horas de tensión en Viña tras el percance de Don Omar

La última noche del festival estuvo marcada por la tensión y un gran desastre que amenazó con derrumbar el show final del evento tras el inesperado inconveniente del puertorriqueño.

24Horas.cl Tvn

Domingo 28 de febrero de 2016

El Festival de Viña del Mar ha llegado a su fin luego de una intensa semana en la que se presentaron en el escenario reconocidos artistas. Sin embargo, un inesperado evento logró remecer a la organización, por el que debieron enfrentar horas de tensión para poder culminar con éxito una nueva edición del tradicional viñamarino.

La noche del viernes una llamada proveniente de Estados Unidos encendió las alarmas de la organización, y es que el encargado de abrir la última noche del festival, el reggaetonero Don Omar, había sufrido un retraso en uno de sus vuelos, lo que le impidió llegar con tiempo a Viña, aterrizando a pocas horas del inicio de la jornada festivalera.

Según consigna La Tercera, el puertorriqueño perdió el vuelo que lo traería desde Miami a Chile debido a que la línea aérea en que se trasladaría -LAN- no permitió que abordara el vuelo que conectaba ambas zonas.

La tensión no se pudo ocultar dentro de la organización del festival y es que la tragedia amenazaba con la ausencia definitiva de Don Omar. Las reacciones debieron ser rápidas para asegurar la presencia del cantante en el escenario de la Quinta Vergara.

Las productoras del evento Time 4 Fun y Bizarro en conjunto con el canal que se adjudicó los derechos del festival comenzaron a actuar. Fueron 40 millones de pesos los que debieron desembolsar para contratar un jet privado que pudiera traer de la manera más pronta posible al cantante, quien ya acumulaba algunas horas aguardando por una respuesta.

De acuerdo al citado medio, los altos nombres detrás de la organización debieron gestionar los permisos dentro de todos los países por los que circularía el jet privado con un escueto límite de tiempo.

Pero no sólo ellos fueron los afectados, los efectos colaterales que implicó el inconveniente llegaron hasta los animadores del show, quienes producto del atraso y posterior reajuste en la programación de la noche del cierre, debieron modificar sus libretos para la jornada.

Finalmente, tras largas horas de tensión y gestión, el cantante boricua salía a eso de las dos de la madrugada al escenario de una repleta Quinta Vergara para dar el show de cierre de la 57 edición del Festival de Viña del Mar.

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