El Hotel O'Higgins se ha convertido en un verdadero ícono histórico del Festival de Viña del Mar.
Construido en la década del 30, el tradicional hotel fue inaugurado junto con el casino de la Cuidad Jardín, y siempre estuvo ligado a las actividades del Festival de Viña del Mar.
Sin embargo, poco a poco dejó de ser el centro neurálgico del certamen viñamarino.
Recordado por ser el escenario de los primeros programas satélites, aún se realizan dos actos tradicionales en el lugar, el mediático piscinazo de la reina festivalera y el asado para la prensa.
En sus años de recepción de famosos, permanecía casi dos semanas completas cercado por vallas papales, día y noche custodiado por miles de fans que se agolpaban sólo por ver a sus ídolos
Todo hasta el 2007 cuando el festival trasladó todas sus actividades oficiales al hotel Sheraton Miramar
Estrellas como BackStreet boys, Soda Stereo y Camilo Sesto fueron destacados huéspedes del recinto.