Una tierna niña ha conmovido a las redes sociales.
En su ánimo de incursionar como doctora, tomó sus implementos y le realizó una "cirugía" a su obediente perro.
Su mascota se comportó como todo un paciente ideal dejándose "operar" sin problemas.
Le revisó el hocico, le tomo sus pulsaciones y le examinó el estomago, todo mientras el perrito la miraba tranquilamente.