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¿Tu jefe es tu amigo en Facebook?

Muchas personas se ven en el dilema si aceptar a sus jefes en una plataforma que por naturaleza debiera refleja un mundo más íntimo. Aprende cómo manejar la situación.

Cristián Jara

Martes 30 de octubre de 2012

Redes sociales y trabajo pueden ser una combinación muchas veces peligrosa. Varios utilizan a Facebook para quejarse del lo agotador del trabajo; de lo mal que lo pasas en la empresa o de lo insoportable que es el jefe.

Si le agregamos lo mucho que nos gusta jactarnos de las fiestas del fin de semana; los tragos y la comida; los desahogos o loas hacia nuestros equipos de fútbol y una que otra opinión política, nos encontramos con que nuestro perfiles dicen mucho - a lo mejor demasiado- de nosotros mismos.

Por eso, al enfrentarse a una solicitud de amistad de un jefe o superior hay que pensarlo muy bien antes de aceptar.

Daniel Fajardo, director del diplomado en Community Manager de la Universidad Mayor, establece que el éxito de Facebook tiene que ver con dos cosas: el voyerismo y el narcisismo. "Eso hay que tenerlo muy claro".

"La gente no puede evitar hablar de lo que está haciendo y exponerse. Tendemos a contar más de lo necesario; lo ideal es no escribir tonteras de las cuales nos podemos arrepentir. A todos nos ha pasado", cuenta el especialista.

El 25% de los usuarios más jóvenes de 11 de los principales países en los que tiene presencia Facebook tiene a su jefe agregado como contacto. Mientras que el porcentaje de usuarios que critica al jefe en la red social a nivel mundial es de un 13%.

La tendencia se inclina hacia no aceptar a los superiores, pero ¿cómo "zafar" si tu jefe quiere ser tu amigo?

Para el experto en social media todo pasa por un tema de "confianza" y la relación que se tenga con el jefe.

"Si no está la confianza necesaria para decir derechamente que no, simplemente hay que modificar la configuración de privacidad y limitar el acceso a la información de esa persona".

"Hoy se puede decidir qué cosas mostrar a cada persona. La recomendación es que en sus perfiles de amistad pongan a al jefe en un grupo especial relacionado con el trabajo". Ese grupo tendrá acceso a sólo ciertas actualizaciones. La clave es darle un privilegio restringido; uno de los aciertos del sistema de "biografía" introducido por la red social. 

También es recomendable contar o "quejarse" lo justo.

"Puedes 'postear' que estás agotado, pero no hablar mal de la empresa, ni tampoco dar muchos detalles de los proyectos en que estás involucrado".

Es que existen muchos casos de despidos por causa de Facebook en el mundo.

En 2009, por ejemplo, una mujer suiza embarazada pidió licencia argumentando que no podía estar frente al computador y necesitar mantenerse en cama a oscuras. Sin embargo, su jefe se dio cuenta que estaba conectada y fue despedida.

Otro caso -que puede representar a más de alguno- es un despido que se dio en el 2010 en España. Un hombre aludió a una emergencia familiar para no ir a trabajar, pero torpemente decidió subir las fotos de la monumental farra de la noche anterior.

Facebook es una tentación para presumir y exponerse más de la cuenta.

ALGUIEN TE BUSCA

En la actualidad es mucho más habitual de lo que se cree que un empleador busque los perfiles de Facebook cuando está seleccionando personal.

"Hoy se revisa el currículo y después, lo primero que se chequea, es el Facebook" dice Daniel Fajardo, explicando que "es mejor que una entrevista sicológica para conocer más allá del papel a los candidatos".

"Lo mejor es que las personas se den el tiempo de configurar bien las opciones de privacidad. Establecer muy bien lo que quieres que te vean y lo que no", es la recomendación del especialista que también llama a "no escribir a tontas y a locas".

Tenemos que conocernos bien. Si en la vida laboral no tenemos nada que esconder, seguramente en Facebook tampoco. De lo contrario, ve directamente a "configuración de la privacidad".