La fotografía de Josh J-Mash Marshall, de 28 años, que muestra su cabeza tatuada con una cicatriz igual a la de su hijo Gabriel, se viralizó rápidamente en las redes sociales por lo conmovedora de la imagen.
Todo fue parte de un concurso realizado por St. Baldrick's Foundation, que busca al mejor papá todos los años, bajo la condición de que ellos realicen algún tipo de demostración de amor en apoyo a sus hijos con cáncer. Lo más común era ver a papás que se rapaban para hacer que sus hijos se sintieran mejor, pero nunca habían visto un caso como el de Josh.
Josh Marshall decidió tatuarse esta cicatriz, luego de que su hijo se sintiera afectado después de que vivió una cirugía para tratar su cáncer cerebral. Gabriel fue diagnosticado de astrocitoma anaplásico en marzo de 2015, y se realizó la intervención para quitar su tumor hace nueve meses, por lo que el niño se sentía intimidado debido a lo grande de su cicatriz, así que su padre le propuso esta idea para que se sintiera más acompañado. "Si alguien quiere mirarte, entonces pueden mirarnos a los dos", dijo Josh.
El concurso que se realizó en el marco del día del padre, tuvo como ganador a Josh Marshall con el premio al "Mejor papá rapado" del 2016.
"Me gustaría dar las gracias a todos por ayudar a hacer que esto suceda. Es un honor ser titulado "Mejor padre pelado 2016" pero la verdad es que no soy mejor que cualquiera de los otros concursantes, todos somos grandes padres que haríamos cualquier cosa para ayudar a nuestros niños. Así que, en mis ojos, ¡Todos somos ganadores!", escribió Marshall en su cuenta de Facebook.