Los sobornos no sólo tienen que ser con dinero y una inocente niña lo tiene más que claro.
A través de un video de YouTube se ve como la niña fue descubierta por su hermano cuando, en medio de la madrugada, se levantó a comer unos cheetos.
Aunque en un principio trató de despistarlo diciendo que iba al baño, su hermano no le creyó y descubrió la "maldad".
Cuando amenazó con acusarla con su mamá por comer golosinas en medio de la noche, la pequeña no encontró nada mejor que ofrecerle un puñado de cheetos que tenía que considerar "como dinero".
La tierna escena ha conmovido a las redes sociales.