"Formas primordiales", "es increíble" y "debe costar miles de dólares" son algunas de las frases que un grupo de personas lanzó al ver una supuesta obra de arte, aunque en realidad, estaban siendo víctima de un experimento social.
Un joven llamado Boris Lange llegó hasta el Museo de Arte Moderno en Arnhem, en Holanda, para mostrarles a sus visitantes una presunta obra de arte que, en realidad, no era más que un afiche de la tienda IKEA.
La idea del experimento era demostrar que las personas tienen una visión algo "altanera" sobre el arte, o como dicen "el arte es subjetivo".
Revisa el divertido resultado en el siguiente video:
Experimento social: El profundo análisis de expertos en arte a un afiche de tienda
Experimento social: El profundo análisis de expertos en arte a un afiche de tienda
Un grupo de visitantes a un museo de Holanda entregaron sus mejores críticas a un cuadro que, según pensaron, era una obra de arte muy valiosa.
Imagen: reproducción / YouTube