En los últimos meses, en España, se descubrió la cruel práctica de dejar trozos de carne con clavos y agujas en las plazas públicas para que animales los consuman. Ante esta situación, un veterinario escribió una carta en redes sociales con todos sus descargos.
El veterinario relató una historia que llegó a su consulta, un niño de 10 años había paseado con su perrita por el parque e ingirió un trozo de carne que tenía clavos, debido a que perforaron su intestino tuvo que ser operada de urgencia, sin saber si sobreviviría.
"A todos aquellos que odian tanto a los perros cómo para hacer algo así, y están acostumbrados a estos actos infames. No matas a un perro, matas a ese niño que lo quiere como a un hermano, matas a toda la familia que tiene detrás, a sus conocidos que ven cómo sufren, y a los veterinarios que no han podido hacer nada para salvarlo" relató el veterinario en su carta.
La carta que fue titulada como "Carta de un veterinario a un asesino" fue difundida por diversas organizaciones animalistas para concientizar a la población de estos crueles actos y criticar a quienes dañan a los animales.
"Tú, que envenenas a los perros. No eres una persona, eres un monstruo, y ni siquiera puedo desearte un castigo y que pagues por lo que has hecho, porque tú ya estás muerto en vida." finalizó el veterinario.